Para cumplir con las señas de una verdadera bobber han despojado de casi todo a la Bonneville T120 hasta dejar sólo lo imprescindible. Con sus líneas despejadas y silueta baja, asiento monoplaza, manillar ancho y bajo, carrocería y faro reducidos al mínimo, depósito esculpido, llantas de radios, una rueda trasera ancha y una imprescindible zaga de aspecto rígido.
La Bobber está impulsada por un motor Bonneville de 1.200 cc con una configuración especial bobber para entregar más par motor y potencia a bajas revoluciones y cuenta con dos silenciosos biselados y su doble caja del filtro de aire que sumergen al motorista en una burbuja de auténtico sonido Bonneville Hot-Rod.
El acelerador es electrónico,refrigeración liquida y mantenimiento cada 16.000 Kilómetros.
Todos los componentes electrónicos están inteligentemente escondidos de la vista para no interferir en sus líneas minimalistas. La tecnología orientada al motorista y el característico escape recto de la Bonnie con el catalizador oculto se han incorporado a la moto sin perturbar la impresionante estampa de la Bobber.
Cuenta con dos modos de conducción seleccionados y vinculados al sistema RIDE-BY-WIRE: "Road" y "Rain" que ofrece un mayor control y seguridad al motorista en cualquier circunstancia.Los dos modos de conducción se seleccionan mediante el unico boton instalado en el manillar.
Es la primera en su categoría en ofrecer una posición de conducción ajustable,para adaptarse a la talla y estilo de cualquier motorista
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